Dicen que "la duda ofende"...
A mí no. Será que perdí la capacidad de ofender(me) en mi otra vida en la Casa de los Horrores, o en mi etapa aquélla con la cosa de los errores, no lo sé...
Lo que sí sé, maldita sea(s), es que ahora, reflejado en este papel de espejo pixelado, me d(esn)udo delante de todos:
Lo que sí sé (a ciencia incierta) es que a mí, lo que me ofende es que la duda...
sea tuya.
Lo que me cabrea (sin duda) es que la d(e)uda...
sea mía.
No me cabe la menor deuda en mi bolsillo de tus pantalones. Estás en paz con la guerra. Es hora de firmar el armisticio con la paz, aunque se ofenda.
ResponderEliminaryo solo soy un hombre desnudo
ResponderEliminarmirándo a los ojos de la noche
y preguntándole a Dios por qué coño
nunca se puso de mi parte.
Un abrazo.
florián
"Y otra vez números rojos,
ResponderEliminaren la cuenta del olvido"